En caso de accidentes traumáticos, puede ser necesario realizar cirugía oral para reparar mandíbulas rotas o fracturadas y otros huesos faciales. Cuando aparece dolor e hinchazón en la cara, cuello o mandíbulas, una consulta con un especialista puede ser clave para la rápida identificación y tratamiento de cualquier infección subyacente, potencialmente peligrosa para la vida. El tratamiento en tales casos puede incluir el drenaje quirúrgico de un área infectada.

Es muy probable que hayas visto imágenes desgarradoras de niños en el Tercer Mundo que han nacido con labios leporinos y paladares hendidos. Eso no significa que solo ocurra en lugares empobrecidos. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU., aproximadamente 2,650 bebés nacen con paladar hendido y 4,440 bebés nacen con labio leporino (con o sin paladar hendido) cada año en EE. UU. Estos ocurren cuando la boca y la cavidad nasal de un niño no crecen adecuadamente juntas antes del nacimiento, lo que resulta en una separación en el labio superior, el paladar o ambos. Se necesita un equipo de especialistas y mucho tiempo para tratar los labios y paladares hendidos, y los cirujanos orales son miembros vitales de esos equipos.